Quizá la clave está en la inevitabilidad de los otros... quizá tenemos que acostumbrarnos a vivir con los demás, con sus ideas y con sus "capulladas" como los demás se acostumbran a las nuestras...
Casi me ha salido un mandamiento moral... y es que Hegel se nos ha colado en esta sociedad moderna y se tira de su dialéctica hasta para comprar la barra de pan.
¡Cuanto tiempo se pierde en rebatir ideas tan válidas en el fondo como las de uno!
Que todo se daría por bueno, si se superaran con una nueva síntesis las dos ideas iniciales. Lamentablemente, en este país se termina imponiendo una de ellas, sea por la fuerza o por el poder de la democracia.
Tengo hoy un lunes al uso, dos reuniones a falta de una , y todo el día rodando en la rueda para no llegar a nada. Intentaremos que la cosa termine mejor de lo que ha empezado.
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